Ni siquiera el propio desamor Es el peor enemigo del amor, Hiere la duda como fino puñal, mata el golpe fatal de la mentira
Toda palabra que se inspira en ellas, sacudirá las fibras más impuras. Serán espinas de las rosas, van perdiendo su frescura Son las dudas las espinas, como el sol cuando enceguece. Nunca las nubes parecen lograrlo si ensombrecen, la tierra, el cielo, el amor y todo